Martes 19 de Noviembre 2024.
Expertos explican cómo gestionar esta etapa mejora el bienestar emocional y la productividad.
Para muchas personas, una mascota no es solo un animal de compañía, sino un miembro de la familia. La muerte de un perro, gato u otro compañero animal puede ser devastadora, dejando una huella emocional profunda que afecta tanto la vida personal como el desempeño laboral. Sin embargo, este tipo de duelo, aunque común, sigue siendo poco reconocido en los espacios laborales. Mientras algunas empresas comienzan a abordar este tema con políticas más empáticas, en Chile ya se discute formalmente su regulación. Desde abril, un proyecto de ley busca modificar el Código del Trabajo para incluir un permiso laboral pagado por la pérdida de una mascota. Este cambio responde a la transformación en las dinámicas familiares y a la importancia de los animales en la vida de las personas. En paralelo a este debate legislativo, expertos en recursos humanos y bienestar animal destacan que las empresas pueden jugar un papel clave al implementar medidas para apoyar a los trabajadores en estos momentos difíciles. Desde licencias específicas hasta talleres de apoyo, el camino hacia una gestión del duelo está lleno de posibilidades, todas con un impacto positivo en la salud emocional y la productividad. Licencia por duelo El proyecto de ley, actualmente en revisión por la Comisión de Trabajo del Senado, propone un permiso laboral pagado en caso de muerte de una mascota registrada. Según datos del Programa Mascota Protegida, en Chile existen más de 12 millones de perros y gatos con dueños, cifra que evidencia el fuerte vínculo entre las personas y sus animales de compañía. “Las empresas pueden implementar políticas de licencia por duelo relacionadas con la pérdida de una mascota al incluir este tipo de situaciones en sus reglamentos internos. Esta medida podría otorgar entre 1 y 3 días de licencia, dependiendo de las necesidades de la organización”. Nataly Cornejo, CMO de HRX Talent Nataly Cornejo, CMO de HRX Talent -consultora de recursos humanos- dice que el impacto va más allá de la empatía inmediata. “Reconocer el vínculo emocional con una mascota, valida las experiencias personales de los empleados y promueve un entorno de trabajo más humano. Esto no solo fortalece la lealtad hacia la empresa, sino que también disminuye el estrés emocional, facilitando una transición más rápida hacia la productividad”, agrega Cornejo. Apoyo a los colaboradores Más allá de las licencias, hay acciones específicas que pueden marcar la diferencia en el duelo por la pérdida de una mascota. Cornejo menciona estrategias clave, como la escucha activa y la flexibilidad horaria. “Ofrecer horarios ajustados o la opción de trabajo remoto puede aliviar la presión de cumplir con obligaciones laborales inmediatas, permitiendo a los empleados procesar su pérdida”. Por su parte, María Jesús García-Huidobro, gerenta de desarrollo y negocios de Trabajando.com, propone que las empresas desarrollen convenios con centros de salud mental para garantizar un apoyo profesional accesible. “Es importante que las organizaciones empaticen con las realidades de sus colaboradores. Entender que los problemas personales afectan el rendimiento laboral permite crear un ambiente de trabajo más receptivo y humano”. Ambas expertas coinciden en que pequeños gestos, como enviar un mensaje de condolencias o brindar acceso a recursos psicológicos, tienen un impacto positivo en el bienestar emocional de los trabajadores. Talleres y espacios de apoyo emocional Otra herramienta valiosa para gestionar este tipo de duelo son los talleres o grupos de conversación. Cornejo destaca la utilidad de estos espacios, especialmente cuando están liderados por psicólogos especializados. “Estas actividades ayudan a normalizar el duelo en un entorno seguro, permitiendo que los empleados compartan sus experiencias sin temor a ser juzgados”. Las empresas que adoptan estos enfoques también fortalecen su cultura organizacional, posicionándose como lugares de trabajo empáticos y responsables. Esto, a su vez, fomenta un mayor compromiso y retención de talento, según indican las expertas. Reconocer el vínculo para promover el bienestar Ignorar el duelo por la pérdida de una mascota tiene consecuencias que afectan tanto al trabajador como al equipo en su conjunto, estiman especialistas. Según Cornejo, la falta de validación emocional puede generar aislamiento, estrés y disminución de la productividad. “El duelo reprimido puede intensificar el riesgo de ansiedad o burnout, afectando la capacidad de concentración y toma de decisiones”, explica. Aracely Cretier, fundadora de Club de Perros y Gatos -tienda y farmacia veterinaria-, indica que este tipo de duelo no solo afecta a las personas, sino también a otras mascotas del hogar. “Es clave preocuparse por el duelo de otro perro o gato que quede en la casa, ya que ellos lo viven igual o más profundo que nosotros”, comenta. El papel de las mascotas en la salud emocional está respaldado científicamente. “Acariciar o jugar con una mascota aumenta la producción de oxitocina, endorfina y serotonina, las llamadas ‘hormonas de la felicidad’ ”, destaca Cretier. Este vínculo positivo refuerza la importancia de que las empresas reconozcan las emociones asociadas con la pérdida de un animal de compañía.
Fuente: Emol.com